Mi hijo adolescente, ¿cómo lo ayudo a aprender de sus emociones en esta etapa?

La adolescencia (sí, la temida adolescencia 😉 , míralo aquí) es una etapa donde veremos parte de los cimientos de nuestros hijos, ya que los retos que afrontan tanto físicos como mentales hacen de éste uno de los periodos más complicados de la paternidad y la maternidad (y, por supuesto, para tus hijos).

¿Antes te contaba todo y ahora todo esto cambió repentinamente? ¿Está inusualmente distante? ¿Empiezas a sentirlo como un desconocido? Es momento de actuar y abrir la puerta al mundo de la adultez. 

Hoy te traemos 1 dinámica y un método para que tu hijo adolescente sienta que puede recurrir a ti en cualquier circunstancia.

Reto o verdad: indaga sus emociones y experiencias actuales compartiendo las tuyas propias

Aunque verdad o reto se asocia siempre a amigos y juerga, algunas modificaciones pueden ser divertidas y aún más: educativas. Pero la única forma de que esto suceda es que hagas de ese juego un espacio de sinceridad y no juicio. Es decir, nada de lo que sea contado durante el juego podría ser castigado o penalizado. De otro modo, solo se jugará una vez (tu niño o niña mayor no querrá repetir, lo cual no te conviene).

El juego consistirá en tener una pila de retos y una pila de preguntas, quien no quiera responder la pregunta, deberá coger una carta de reto de la pila. Puedes crear las cartas con toda la familia, de forma tal que todos puedan hacer preguntas de cualquier tema, algunas ideas para llenar las pilas:

  • ¿Qué sentimiento tienes hacia la escuela o el trabajo?
  • ¿Has visto alguna película que te haya generado rechazo? 
  • ¿Has fumado alguna vez?
  • Hacer un TikTok todos juntos.
  • Hacer una imitación de un artista que otros elijan

Todas estas preguntas tienen la intención de dejar “secretos al descubierto” bien sea de los padres o de los hijos, el objetivo es que si tú alguna vez has probado la marihuana, lo confieses.

¿Qué dices? Mi hijo no puede saber estas cosas. Sí, sí puede. Estas conversaciones fortalecen la relación. Evidentemente contarás tu historia, le ayudarás a conocer las consecuencias y contextualizarás el tema. Le enseñarás sobre algo que de otro modo se sentirá como un sermón aburrido.

Si requieres apoyo para estructurar la dinámica de forma completa, o para darle la vuelta a las explicaciones y las enseñanzas, contáctanos. Podemos apoyarte en el manejo de dinámicas personalizadas para afianzar la confianza en familia.

Un punto vital en esta etapa es la sexualidad, enseñarles a ver la exploración física como algo por lo que no deben sentir culpa pero sí responsabilidad es básico. Y no, no pienses que aún es demasiado joven, no dejes que otros le enseñen por ti.

Método de apertura emocional:¿cómo hacer que venga a mi cuando necesita apoyo o consejo?

¿Te has sentido con agobio alguna vez y lo que le respondes a tu hijo cuando pregunta es “nada, sigue con tu tarea”? ¿Estás de mal humor repentino y lo callas, pero les hablas mal?

Empieza a compartir tus emociones y lo que pasa en tu vida con tus hijos.

Siempre cuidando que sea un lenguaje comprensible para ellos, escucha las valoraciones que te de sobre la situación. ¿Alguna vez has sentido lo refrescante de la visión de los más jóvenes sobre los problemas? 

Esta comunicación te ayudará a establecer un puente. Solo aquellos que tienen la capacidad de compartir sus emociones, sus miedos, sus alegrías, sus sueños, es a quiénes les serán abiertas esas mismas puertas en el periodo de adolescencia. ¿Sabes por qué?

Pues sí, porque básicamente, como bien sabes, aprendemos viendo. Mimetizamos las actitudes de nuestros padres. Cuando estamos en la transición hacia la adultez imitamos lo que hemos visto en los adultos de nuestro entorno toda la vida.

Aunque sientas que no entenderán por lo que estás pasando, que no les importa, o incluso que no quieres agobiarles con ello, te decimos: confía. Confía en las capacidades emocionales de tus hijos, nunca más les subestimes.

¿Estás pensando que tu hijo es pequeño aún para todo esto? Si tiene edades entre 7 y 12 años, quizá es mejor que le eches un vistazo al artículo anterior, si tiene más edad que eso, de nuevo: confía.

Nos leemos la próxima semana, sabemos que lograrás la comunicación plena con tus adolescentes y llegarás al equilibrio. No serás su amigo, pero serás un padre o una madre en quién confíen como consejero/a y ayudador.

Esto al final es el objetivo de todo padre, enseñarles a sus hijos todo lo que puedan para que estén lo mejor preparados posible para experimentar su propia vida.